En algo habrá que darle la razón a un tipo
como Omar cuando ayer, oportuno e irónico por una vez en el concurso, ante el pifostio que se montó con la entrada de su
ex novia, dijo aquello de que sólo falta que le metan en la casa a su perro y a
su primo, y así al menos a éste que está sin curro le hacen un favor. Y
también por primera vez en todos estos días el de la gorrita torcida logró
sacarme una sonrisa y que no torciese el gesto con desagrado como me suele ocurrir ante su presencia
y con casi todo lo que suele decir y hacer.
El caso es que mi preocupación aumenta al comprobar que la apuesta de GH por este personaje
es tal en estos momentos que, a día de hoy, cuatro personas de las dieciséis
que hay en Guadalix, es decir el
25%, giran alrededor de su insigne persona por estar relacionadas con su vida anterior a
entrar en la casa. Habrá algo oculto, me he preguntado varias veces, estupefacto
y sorprendido, que se me haya escapado y no supiera ver en Omar, alguna cualidad
extraordinaria que el programa camufla con maestría para revelarla en mejor momento. Si hay algo más
allá de una vida complicada y desgraciada que pudo acabar de la peor manera, si no fuese gracias a sus amigos y a su ex, como él mismo nos ha relatado más de una vez, ahora mismo soy incapaz de
adivinarlo. Sólo sé que no le encuentro el punto a este concursante y
para mí sigue siendo el primero de la
lista para expulsarlo de la casa.
Y no sólo es el programa
quién nos lo restriega por la cara. Lo más asombroso es el tipo de gente con la
que se relaciona; las personas que lo defienden y le dan su amistad, como Vitín. Todo un mérito. Aún ayer en la
última entrada del blog desgranaba ese apoyo incondicional de su amigo y las
conclusiones a las que llegaba, poco amables por cierto. Esto mismo me
vale para sus relaciones amorosas ahora que acabamos de conocer a Lucía, su ex novia. - ¡Qué coño
hacía una tía como ella con Omar! - Volví a preguntarme apenas la vi entrar por la puerta y no digamos a
medida que, enganchado hasta las tantas de la madrugada al directo, asistía
fascinado a como se metía en el bolsillo a unos cuántos de la casa que la
escuchaban entusiasmados en el jardín. No sabemos todavía por dónde nos
va a salir, si se trata de tía cojonuda o de una perfecta víbora, pero nadie
puede negar que la chica tiene carácter, personalidad, labia, encanto personal y, al
igual que Azahara, posee
una virtud que se tiene o no se tiene pero que es imposible comprar: Las
cámaras la adoran con una voluptuosidad golosa privilegio de unos pocos.
Eso en televisión no tiene precio y ella lo sabe.
Apenas dos horas después de acabar
la gala había logrado encandilar al grupo de los más jóvenes de la casa, y a Alfredo sobre todo. Desde que ella entró
parece otro, como si hubiese resucitado tras regresar del mundo de sus sueños y
sus miedos. Es como si la entrada de Lucía supusiese una descarga de adrenalina que lo
ha espabilado hasta darse cuenta por fin de donde estaba. Una presencia que
suponía al mismo tiempo un alivio para él. - ¡Por fin una morena entre tantas
rubias! - exclamó él especialmente contento al verla y al conectar inmediatamente con ella. Y ya de
madrugada en el jardín, parecía no dar crédito a su suerte cuando descubrió que
la chica además canta y tiene una vena muy flamenca. Después, cuando pidieron a Lucía que cantase, él y Shami que fueron los que más
insistieron, la escucharon deslumbrados y felices. No sé si este entusiasmo inicial, del que
también participaba el torero,
continuará los próximos días ni qué efecto tendrá en la relación con su medio hermano, pero la
situación se vuelve interesante y muy compleja; más aún teniendo en cuenta que Paula y Lucía serán pareja para nominar y recibir nominaciones. La teoría de los arrastres en las
nominaciones y sus dilemas que intentaba explicar en otra entrada cobra ahora con estas
circunstancias una importancia inusitada.
Como acabo de decir, no sé por
dónde nos saldrá Lucía pero tal como he comentado en otras ediciones de GH me
encantan y me interesan los concursantes que gracias a su implicación en el programa, a lo que hacen
y dicen dentro de la casa, me permiten ver y descubrir a los demás. Esos concursantes que consiguen que aflore lo
mejor de sus compañeros ayudándonos a entrar en la realidad de esos sueños de
los que hablaba en la entrada anterior. No me gusta la forma, ni la razón por
la que ha entrado Lucía en la casa – este año he prometido no enfadarme y la decisión de escribir sobre GH 15 es una forma de reconocer que asumo de momento
estas incongruencias y contradicciones – pero tengo el pálpito de que la ex de Omar es una
concursante de ese tipo. Tal vez mañana esté renegando de todo lo que digo
ahora pero “bueno, esto es un juego”, como muy acertadamente dijo Fran a Shami en un momento determinado, cuando ésta se quejaba ante el
apoderado del torero de las posibles consecuencias en las nominaciones por su bronca con
las hermanas de Puente Genil.
Lucía, con su entrada triunfal
en la casa - un terremoto que ha removido los cimientos de Guadalix - ha tenido la virtud
de despertar a algunos concursantes como Alfredo
de su relativo letargo, pero sobre todo ha caído como una bomba repleta de
metralla en medio de la relación de su ex con la barcelonesa. El encuentro con Paula fue de los que marcan época en este
programa. Un encuentro que comenzó con la hawaiana tan impactada - no se lo
podía creer - que su voz de pito desapareció sin dejar rastro en toda la noche.
Al principio intentaron hablar con cordura y templanza de la situación creada pero
enseguida esa posibilidad se tornó imposible a medida que la Paula fue
consciente del papelón que le tocaba jugar en semejante tragicomedia. Y cuando
entró Omar para encontrarse con el
percal el ambiente se fue enrareciendo progresivamente de tal manera que ni
siquiera el regreso paulatino de los demás de la sala de nominaciones ayudó
a calmar una tormenta que parecía que se iba a desatar en cualquier momento. La frase tatuada en el interior de su brazo, que Lucía mostró al público y a Mercedes en el plató, parecía una premonición de
lo que se avecinaba: Nadie dijo que fuera fácil.
Desde luego que no será fácil para ninguno de los tres, pero quién lo
tendrá más complicado, después de pringarse a tope con Omar estos días, y lo de pringarse no lo digo con segundas, es Paula.
Puedo equivocarme pero mi
teoría es que en el fondo, más allá del aparente cabreo que muestra de cara a
la galería, él está encantado con el panorama que se presenta; y teniendo
en cuenta sus ansias de protagonismo y su evidente egolatría esta oportunidad de convertirse aún más en el
centro de esta edición de GH le pone
cantidad. - Lo estoy petando, seguro - pensará él tan pendiente siempre de
mirar a las cámaras y al quite de mostrar un guiño cómplice para su colegas,
como el último gesto de victoria que nos dedicó después del cutre “sexiduching”
rapidito que se marcó con Paula
mientras se duchaban juntos.
Resulta difícil creer otra cosa que no sea puro despecho tras observar la
actitud y las palabras de Omar a lo
largo de la noche con la entrada de Lucía.
Esa necesidad inmediata de aclarar ante toda España, y para tranquilizar supuestamente a Paula,
que se siente muy tranquilo al comprobar que tras el encuentro con su ex ya no
siente nada por ella; algo que le preocupaba seriamente según confesó. Una
declaración que no encajaba con los múltiples reproches que le hizo y que se
pueden resumir en una frase que largó en medio de la discusión a la que decía que iba a ser la madre de sus hijos. Unas palabras que aclaran la
verdadera naturaleza de las cosas por su parte: - ¡Por tu culpa estoy con esta
niña! -. Blanco y en botella.
Después
de una noche tan intensa con la entrada de Lucía,
todo lo demás quedó prácticamente eclipsado, tanto las nominaciones y sus consecuencias
como el resto de las tramas que suceden en la casa. Con tantas cosas pendientes
resulta imposible abordarlo todo en una entrada, sólo diré que, descartada Alejandra para la expulsión a la vista
de las encuestas que se barajan en las redes, algo previsto y de lo que me
alegro, entre Shami y Mayca no tengo nada claro quién quiero
que salga expulsada el próximo jueves. Aunque considero que en la disputa entre ellas
la razón está del lado de Maika, al menos en el fondo de la cuestión, porque de las formas habría mucho que hablar en ambos casos; creo que en este momento las dos aportan cosas y también las dos han hecho
méritos para la expulsión. En todo caso, para el juego, teniendo en cuenta que
en Guadalix se quedaría todavía Loli si se va su hermana, entiendo que Shami pueda aportar algo más. Y lo más importante, se irían deshaciendo las parejas. Una circunstancia muy
interesante, a mi modo de ver, porque libera de ataduras al los concursantes que
queden en la casa sin pareja, como le pasó a Shami al irse Paco, aunque eso signifique también que deban afrontar en solitario los
riesgos que eso supone mientras las parejas continúen siendo mayoría en el concurso.
En todo caso esta semana lo que la audiencia decida bienvenido sea.
Forastero marulo
DEL MINUTADO: PD: 8.15 Dejo este párrafo para contaros lo que ha pasado durante las últimas tres horas. En este momento Omar en el jardín, de la mano con Lucía, que ahora vuelve a ser su novia. Sí, lo que oís, después de una charla tensa del carabanchelero con Paula y una pelea de gatas entre Lucía y la hawaiana en la que han volado los cuchillos, el muchacho ha decidido volver con la morena. El chico no quiere de momento besar a Lucía, pero ya hablan de su futuro juntos. Es oficial, set y partido para Lucía, que en algo más de 24 horas ha recuperado a su chico al que ahora mima en el sofá: "Duermete mi amor", le dice con la cabeza del muchacho en su regazo. Buenos días.
ResponderEliminarMARULOOOOOOOOOO, ya está.
Ácrata, menudo fin de semana nos espera. Estuve siguiendo la fiesta en directo hasta muy tarde. Y estaba claro que tal como se desarrollaba todo podía pasar cualquier cosa, sobre todo después de que Omar abordase a Lucía y ella se fuese llorando al confesionario. Acabo de ver las consecuencias del fiestón y la verdad es que no me asombra nada de lo que ha ocurrido.
ResponderEliminarLa carpetilla fulera estalló en mil pedazos y Lucía se llevo el gato al agua. Y mientras Omar y Lucía duermen plácidamente juntos y abrazados estaba ahora viendo en el directo a Paula desconcertada con Maika a su lado apoyándola en estos momentos tan críticos para ella. La única por cierto y se está ganando la salvación el próximo jueves.
Me fastidia acertar con la premonición que daba a entender en esta entrada, resumida en la expresión - blanco y en botella - que utilicé para resaltar los verdaderos sentimientos se traslucían en Omar respecto a la hasta ese momento era su ex novia. Lo que nunca imaginé es que la cosa se resolviese tan pronto. Y eso que nos mintió descaradamente cuando le dijo a la pobre de Paula que al ver a Lucía se dio cuenta que ya no sentía nada por ella. Cuando se darán cuenta que a nosotros no pueden engañarnos con palabras porque lo vemos todo, y que la verdad siempre está en los gestos y en las miradas cuando se contradice con lo que decimos.
También me fastidia acertar en que la verdadera perjudica con la entrada de Lucía sería Paula. No había duda tal como se ha comprobado. Lo que tengo claro, es que si ella administra bien esta situación y no tira la toalla, puede encontrar gracias a esto una autopista directa hacia la final. Toda una alegría para Jota, ya que Paula es una de sus favoritas y sinceramente, la relación con Omar no hacía más que perjudicarla.
ResponderEliminarSumándome por una vez a los comentarios que se leían estos días en el directo, supongo que de carpeteras o quinceañeras alucinadas con lo que estaban viendo: ¡¡ Jo tía que fuerte, esto es brutal!!
comoooorrrrrr, llamándole amor en su regazo???? pero éto que é, qué bombazo é éte.....
ResponderEliminarjoé, la cosa es más grave de lo que suponía, así sin más, amor abierto en la casa y la paulita en la basura??
buenooooooo
forastero, me encanta tu entrada, me encanta cómo lo cuentas
paula es mi favo porque no veía a nadie que la defendía y me gustó cuando la ví, como muchos, aunque de ella me sorprendió porque ese aire fresita o japiflouer era más pa no gustarme ná de ná
aprovecho la reunión que todavía no me he enfadadogh eehhhsss :) los lapsusgh no cuentan, que la acratita tuvo el otro día un lapsusgh mu agudo jajajajja
os imagináis que estuviera paquito ahí dentro ayyys lo mejorcico de la retransmisión
y paula me ha ido gustándome cada vez más, cuanto más se la critica por cuentista o falsa o tonta o lo que sea, yo la veo más real, auténtica, sencilla, simpática, mimosa, dulce y cariñosa
ResponderEliminarestoy deseando ver qué ha pasado y qué está pasando